#ProcesoConstituyente: Los costos del «no vamos» de #ChileVamos

La decisión de restarse institucionalmente del proceso constituyente del gobierno estuvo lejos de generar un cierre de filas en Chile Vamos, el conglomerado de la centroderecha. Por el contrario, evidenció diferencias internas, generó recriminaciones cruzadas y desató la molestia del ex Presidente Sebastián Piñera.

Chile Vamos

El domingo 8, el ex Presidente Sebastián Piñera recibió la propuesta constitucional que la comisión ad hoc de Chile Vamos -presidida por el senador Alberto Espina- elaboró para sumarse a la discusión que se ha propuesto desde La Moneda.

El texto -que se lanzó oficialmente cuatro días después, el jueves 12- es el resultado de seis meses de trabajo, durante el cual un grupo de expertos y parlamentarios redactaron 80 ideas que -a su juicio-deben incluirse en un cambio a la Carta Fundamental.

Con estas propuestas -que serán difundidas en cabildos paralelos a los impulsados por La Moneda-, el conglomerado integrado por la UDI, RN, Evópoli y el PRI intentarán contrarrestar la tercera y última gran reforma del gobierno de Michelle Bachelet.

La unidad del conglomerado opositor frente a este tema es -sin embargo- aparente: las diferencias respecto de participar o restarse del proceso constituyente del gobierno develaron debilidades estructurales en Chile Vamos, desataron recriminaciones cruzadas e indignaron al ex mandatario, quien no pudo evitar que su liderazgo terminara golpeado.

El impasse se produjo la tarde del lunes 9, cuando el consejo político del bloque -integrado por representantes de los partidos e independientes, entre ellos el propio Piñera, quien no asistió a la cita- se reunió para abordar el tema constitucional y decidió que el conglomerado no participaría institucionalmente en el proceso impulsado por La Moneda. A cambio, daba libertad de acción a los militantes para concurrir a cabildos o encuentros locales.

“Chile Vamos institucionalmente no avalará ni legitimará el denominado proceso constituyente de este gobierno, puesto que no cuenta con las garantías que permitan un proceso legítimo”, se estableció en el voto político acordado por el consejo y que fue leído por la presidenta del PRI, Alejandra Bravo, al término de la cita.

Según los asistentes a la reunión, el debate que precedió a la definición estuvo marcado por duros argumentos entre los defensores de cada postura, polémicas ausencias y cambios inconsultos en acuerdos que se habían tomado.

No habían pasado ni 12 horas cuando algunos asistentes al encuentro acusaron en privado que la votación había sido “desordenada y poco clara” y no fueron pocos los parlamentarios que desafiaron públicamente la decisión y anunciaron que convocarían a encuentros locales.

Este último punto fue el que encendió la mecha, pues puso un manto de dudas sobre el peso específico de la instancia y cuán vinculantes son sus decisiones para los integrantes de Chile Vamos.

“Si un consejo político de esta magnitud no tiene legitimidad para tomar este tipo de definiciones, entonces uno se pregunta cuál es su fin”, señaló a Reportajes el diputado Patricio Melero, quien también es integrante de la instancia.

No pocos son los que coinciden en que parte importante de los esfuerzos desplegados por las directivas de la UDI, RN, Evópoli y el PRI por dar forma a una institucionalidad en la oposición -los que han contado con el respaldo de Piñera- quedaron en entredicho tras este episodio.

Lo que no muchos se explican -en todo caso- es cómo un tema que parecía zanjado por el comité ejecutivo de Chile Vamos-, cuya última cita se produjo el viernes 6 en casa del presidente de RN, Cristián Monckeberg-, se diluyó el lunes 9, luego de que algunos parlamentarios insistieran en que el consejo político debía tomar una definición.

Y en este último tema se apunta al senador RN Andrés Allamand, quien desde un inicio se ha mostrado como un férreo detractor del plan desplegado por La Moneda.

El desorden dejó como uno de sus principales damnificados a Piñera, quien no logró ordenar el debate del conglomerado que lo tiene como su referente.

El ex mandatario no ocultó su molestia con el “espectáculo” -según lo calificó en privado- dado por Chile Vamos en este tema.

Tal como publicó Reportajes hace dos semanas, fue el propio ex presidente quien había emplazado al sector a tomar una decisión única sobre el proceso constituyente. El mandato era la primera vez que Piñera solicitaba de manera explícita una definición a su coalición.

Aunque el ex mandatario ha levantado críticas profundas al proceso constituyente desplegado desde el gobierno y era partidario de la marginación del bloque, consideraba esta última como una decisión sólo táctica que -sin embargo- terminó por transformarse en una polémica que desordenó al conglomerado.

“Chile Vamos debe aprender de los errores cometidos en las últimas semanas y no seguir metiéndose autogoles tratando de imponer una postura única, cuando, por el contrario, la diversidad de la coalición debiera no sólo ser tolerada, sino que valorada en aquellas materias donde pueden existir legítimas diferencias”, comentó el presidente de Evópoli, Felipe Kast, al ser consultado por este tema.

Un consejo polémico

“Algunos van a ir a fiscalizar, vamos a tener una propuesta constituyente como coalición y -finalmente- tomamos la decisión de no participar en el proceso. Eso, francamente, es esquizofrénico”, señaló un miembro del consejo político de Chile Vamos el lunes 9, en medio de la polémica cita.

La frase es una muestra del tono en que se desarrolló el debate en las oficinas de Libertad y Desarrollo a comienzos de semana.

“El Partido Comunista va a hacer mil cabildos. ¡¡Para qué nos preocupamos si el senador (Manuel José) Ossandón hará 500 y el diputado (Jaime) Bellolio otros 500!!! ”, señalaba Allamand, quien tomó un papel protagónico en la discusión.

Los presidentes de partidos presentes en el encuentro -sólo se ausentó Kast- seguían el intercambio con la tranquilidad de haber aunado previamente una postura común: el sábado 7, los cuatro timoneles de habían reunido en la casa de Cristián Monckeberg, donde acordaron evitar una definición institucional sobre el proceso constituyente, fiscalizarlo y decretar libertad de acción para participar.

El anfitrión quedó mandatado para redactar una declaración que sería presentada ante el consejo político.

Con lo que no contaron los timoneles fue con la ofensiva de Allamand y el diputado Nicolás Monckeberg, quienes ya el fin de semana comenzaron a tomar contacto con los consejeros para instarlos a obligar a la marginación del conglomerado del proceso constituyente.

Sus argumentos eran que éste no ofrecía garantías y que -por el contrario- estaba “viciado”.

En medio de las tratativas surgió una tercera vía impulsada por independientes y alcaldes -entre ellos el coordinador de Construye Sociedad, Diego Schalper, y los ediles Francisco de la Maza y Felipe Guevara-, quienes también proponían restarse del proceso constituyente, pero poniendo el acento en que se debía dar luz verde a un proceso de difusión y debate de la propuesta constitucional de Chile Vamos.

“Chile Vamos ha terminado con la ambigüedad. No participamos de un proceso tramposo y manipulado por el gobierno. Tendremos nuestra propuesta y debatiremos el fondo del tema en el Congreso y ante la opinión pública”, lanzó Allamand a la salida del encuentro.

Minutos antes -según varios asistentes-, el senador había sugerido votar formalmente la participación o marginación institucional del bloque en el proceso constituyente. Al imponerse esta última tesis, Allamand saboreó una victoria que esperaba desde el verano, cuando fue uno de los primeros dirigentes de derecha en plantear sus dudas sobre la emblemática reforma del gobierno de Bachelet.

Entre sus cercanos -en todo caso-, el senador sacó cuentas alegres que asegura decantarán más adelante: y es que pese al desorden inicial lo importante -asegura- fue que el bloque adoptó una postura clara y común.

El problema fue que -al día siguiente- no sólo se desconoció la votación del consejo político, varios aseguraron que el escrutinio de 29 a favor y dos en contra (los dos consejeros de Evópoli) no era real, ya que no había más de 20 personas al interior de la sala, sino que también diversos dirigentes anunciaron que organizarán cabildos y -lo peor- no pocos señalaron que la instancia no era vinculante.

El martes 10, el senador Manuel José Ossandón (RN) fue más allá y señaló que el consejo político de Chile Vamos “no tiene piso para imponer nada”. Lo mismo hizo el secretario general de RN, Mario Desbordes, quien señaló que la instancia “se había excedido en sus funciones”.

La decepción de Piñera

Apenas terminó el consejo político del lunes, el ex mandatario se comunicó por teléfono con al menos dos de los cuatro presidentes de partidos.

Piñera no pudo ocultar su decepción. Esto, luego de que si bien considerara que la decisión de restarse institucionalmente del proceso era la correcta, la forma en que se había realizado no la compartía.

Para el ex mandatario, la definición de participar o marginarse del proceso constituyente pasó de ser una decisión táctica a un serio problema de fondo al interior del conglomerado.

Ya hace algunas semanas, Piñera había hecho llegar críticas a las directivas de los partidos respecto de cómo estaban administrando las diferencias internas del bloque. Las discrepancias internas -comentó en esa oportunidad- terminaban perjudicando el rol fiscalizador de Chile Vamos y sus propuestas alternativas al gobierno de Bachelet.

Como ha sincerado a su círculo cercano, el ex presidente reconoce que este tipo de conflictos no sólo generan problemas al sector, sino que también a él como posible carta presidencial.

Al interior del piñerismo esperan que con la propuesta constitucional lanzada el jueves 12, el conglomerado logre rivalizar y marcar diferencias con la agenda constitucional que ha impuesto el gobierno.

“Con la presentación de la propuesta constitucional de Chile Vamos dejamos atrás una semana bastante movida. El desafío ahora es realizar un debate honesto y compartir con la ciudadanía estas ideas para perfeccionar nuestra propuesta”, dijo a Reportajes el presidente de RN, Cristián Monckeberg.

Eso, sin embargo, aún está por verse.

Link: http://goo.gl/IXOKkQ

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