La senadora tiene un liderazgo que tiene menos anticuerpos al interior del partido que sus antecesores, y se ha mostrado a favor de la mayoría de las propuestas del Ejecutivo, incluyendo la reforma laboral sin reemplazo en huelga.

Fue casi un año en el que Jorge Pizarro estuvo al mando de la Democracia Cristiana. El vínculo de su hijo con SQM y su escapada a ver el Mundial de Rugby cuando su ciudad sufrió un terremoto, minó su liderazgo irremediablemente. Desde el primer día hubo voces al interior del partido que defendían que renunciara a la presidencia. Tras un año, y ante la posible formalización de su hijo, finalmente cedió.

Fue entonces que este sábado la Junta Nacional DC confirmó a la primera vicepresidenta del partido como la nueva líder: Carolina Goic. Y su llegada ha sido bien recibida en la falange. “Asumo la conducción del partido y quiero agradecer la unanimidad que han otorgado todos los miembros de la mesa“, dijo la senadora por Magallanes.

Al interior de la DC dicen que Goic es una de las líderes que tiene apoyo más transversal en el partido. “Es una figura joven con mucho apoyo, que de cierta forma aporta renovación”, dice el cientista político Eduardo Saffirio, quien además destaca que a diferencia del renunciado Pizarro, “no está involucrada en ningún asunto de falta de probidad”. Otro de sus puntos fuertes fue la fuerza que demostró a sus compañeros de partido y al electorado en su lucha contra el cáncer.

Venida del mundo de los “colorines”, que en su momento lideró Adolfo Zaldívar, Goic es actualmente cercana al diputado Fuad Chahín, quien renunció a competir con Jorge Pizarro a cambio de una lista de unidad. Sin embargo, desde la DC dicen que su liderazgo al interior de la falange, a diferencia de lo que sucedía con Ignacio Walker y Jorge Pizarro que generaban anticuerpos en varios grupos, trasciende a las facciones internas.

“Cualquier otra opción habría generado rechazo de uno u otro grupo”, dice una consejera del partido. Algo que Goic deberá ocupar a su favor para unir a la DC de cara a las próximas elecciones municipales y frente a las reformas que propone el Ejecutivo.

En cuanto a este punto, la sobrina del obispo de Rancagua defensor del “sueldo ético” ha sido la principal aliada DC de Bachelet en el Senado y ha defendido los proyectos de corte social. “No ha sido tan divergente como Walker o Zaldívar”, dicen desde el partido. Por ejemplo, en la reforma laboral ha sido una de las principales defensoras de que no exista reemplazo en caso de huelga y se ha alineado a las posturas del PPD y el PS. Esto también ha hecho que el PC, partido que tuvo fuertes roces con Jorge Pizarro, vea en Goic una líder con la que tienen mayor sintonía.

Respecto al proyecto de despenalización del aborto, no ha mostrado una férrea oposición como si lo han sido otros líderes del partido, como Soledad Alvear. Aunque sí ha presentado reparos frente a la causal de aborto en caso de violación y ha sido enfática en decir que el debate del proyecto, que se dará en la comisión de Salud que ella preside, no puede ir más allá de las tres causales planteadas por el Ejecutivo.

“Somos claramente contrarios al aborto en forma libre pero entendemos que estamos llamados a discutir respecto de causales excepcionales que tenemos que ser capaces de mirar”, dijo en su momento la senadora.

La actual timonel de la DC ha sido mencionada al interior de su colectividad como una posible carta presidencial para 2017. Aunque eso no ha sido confirmado oficialmente y solo circula como rumor de pasillo, al menos tendrá una buena oportunidad para demostrar su liderazgo.

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